Todos los hombres mueren…y los que no, son asesinados por George Martin
Juego de Tronos fue, desde sus principios, una serie poco predecible. Cuando en el final de la primer temporada, Ned Stark (al que todos identificamos como el “bueno” de la historia) pierde la cabeza, los fanáticos entendimos que no sería una serie con los parámetros “normales” en los que el bien siempre triunfa sobre el mal. También aprendimos a no encariñarnos con ningún personaje. Por las dudas.
No estábamos equivocados. A través de sus cinco temporadas, Juego de Tronos no ha dejado de sorprendernos montones de veces. Algunas para bien y muchas otras veces para mal.
La quinta temporada no fue distinta. Si bien tuvo un comienzo lento, y hasta (me atrevo a decir) un poquito aburrido, cobró vuelo enseguida y se convirtió en un crescendo de violencia cuyo final nos dejó boquiabiertos a todos.
Y hoy, como somos masoquistas, reviviremos los mejores momentos de este último episodio que nos hizo perder todas las esperanzas y nos dejó llenos de preguntas. ¡Qué los Siete se apiaden de nosotros!
CUIDADO LECTOR: a continuación se vienen serios SPOILERS. Le recomendamos seguir leyendo si vio el episodio «Mother’s Mercy»
- Cersei y la vergüenza
La Reina Regente se pasó casi toda la temporada en un calabozo del High Sparrow, atormentada por las Hermanas Piadosas (de piadosas no tuvieron ni un pelo) que la instigaban para que confesara sus pecados.
Finalmente, Cersei no puede más con su vida y decide hablar para salir de ese infierno. Pero ni lenta ni tonta, la reina confiesa poco y nada. Apenas si acepta que tuvo un desliz con su primito Lancel. Ahora, del incesto con su hermano Jaime, el asesinato de su esposo Robert, los hijos bastardos y demás, ni una palabra.
De todas formas, el High Sparrow la libera. Y la Madre será misericordiosa, pero ni el High Sparrow ni la Fe lo son. Por eso es que Cersei tuvo que hacer el camino de la vergüenza de vuelta a la Fortaleza Roja como los Dioses la trajeron al mundo, despojada de sus ropas, su cabello y su dignidad, frente a una multitud iracunda que le gritó de todo menos bonita.
La perspectiva de ver a la soberbia Cersei completamente desnuda y humillada caminando por las calles de Desembarco del Rey, la convirtió rápidamente en una de las escenas más esperadas por los fanáticos de la serie. Pero al ver a la madre del rey escoltada por una Hermana Piadosa que no paraba de gritarle “¡Vergüenza!”, lo único que pudimos sentir fue hasta lástima por ella. Lástima y una especie de tristeza por aquellos que la llevaron a ese lugar, porque estamos seguros que en la próxima temporada pagarán sus afrentas con creces.
- Sansa y Hediondo
A lo largo de la serie Sansa empezó mal y siguió horrible. Cuando parecía que empezaba a tener agallas, se puso tonta de nuevo. Está bien que estar casada con el enfermito de Ramsay Bolton debe ser espantoso para cualquiera, pero flaca, le cortaron la cabeza a tu padre adelante tuyo y te obligaron a verla clavada en una pica, lo peor ya te pasó, crecé. Sansa, el mundo es cruel. Mucho más si estás en Juego de Tronos.
Así que durante esta temporada, Sansa siguió con su cara de sufrida, resistiendo las perversiones de Ramsay e insultando a Hediondo cada vez que tenía la oportunidad. Pero no contaba con que éste se despertara de su letargo y decidiera darle una mano. Literalmente, una mano hacia el vacío.
Luego de prender una vela en la torre, como le habían advertido para obtener ayuda, y no encontrar allí una respuesta, Sansa decide fugarse sola. Pero en el camino se encuentra con la amante de Ramsay (que es incluso más perversita que él), que amenaza con clavarle una flecha para desmembrarla de a poquito. En ese momento Theon la empuja y ésta cae y se hace pelota contra el piso. Acto seguido, le da la mano a Sansa y saltan al vacío, al otro lado del muro de Invernalia. Esa fue la última vez que los vimos a ambos. Queremos creer que sobreviven a la caída, pero en Juego de Tronos nunca se sabe.
- Myrcella
Myrcella se parece un poco a Sansa en sus comienzos, ¿verdad? Aniñada, enamorada de un príncipe, rodeada de amenazas pero absolutamente ignorante de las mismas. Y así continúa en la quinta temporada, en Dorne, rodeada de las Serpientes de Arena, hijas bastardas de Oberyn Martell, que se la quieren comer cruda para vengarse de su padre difunto. Menos mal que su padre ilegítimo, Jaime y Bronn (ex fiel compañero de Tyrion) fueron a su rescate.
No le sirvió de mucho la verdad. A la vuelta, después de una escena muy conmovedora en la que vemos el lado sentimental del Asesino de Reyes (Kingslayer), cuando le confesó a Myrcella que es su verdadero padre, ésta empezó a convulsionar y a escupir sangre. ¿Por qué? Porque la madre de las Serpientes y viuda de Oberyn consiguió lo que quiso, y lo que parecía un besito tierno de despedida, se convirtió en el final fatal de la hija de Cersei. Una menos.
- El Rey Stannis no tiene quien le escriba
Creo que cuando Stannis decidió prender fuego a su propia hija, la princesa Shireen, demostró que no le importaba nada más que ganar. Y lo hizo tan cegado por su propia ambición que no se dio cuenta que con este acto cruel, sellaba su destino. Al principio parecía que le había salido bien, pues el Dios del Fuego derritió las nieves que no los dejaban marchar a Invernalia. Pero luego, la mitad de sus hombres lo abandonan. También lo hace su mujer, quien al no soportar lo que habían hecho, se suicida. Y para peor, Melisandre, su consejera más fiel y a la única a la que parecía escuchar, también se fuga.
Así que sólo con su alma, Stannis marchó hacia Invernalia y perdió por goleada. Sus hombres fueron masacrados por el ejército Bolton, que no sólo los esperaba ansiosos, si no que los superaba en número ampliamente.
Lo más interesante de esto, es que Stannis sólo y mal herido, se encuentra con Brienne, quien finalmente pareció cumplir alguno de sus votos y lo sentenció a morir por su espada. Y la espada baja, pero no la vemos dar su golpe mortal. ¿Habrá encontrado Stannis su final? ¿O el Dios del Fuego tendrá más planes para él?
- Arya no la vio venir
La situación de Arya es rarísima: está en Braavos, en la Casa de Blanco y Negro, con el personaje que nosotros conocemos como Jaqen H’ghar (que debe estar en el Top Ten de personajes más misteriosos de Juego de Tronos), aprendiendo a ser NADIE. La verdad que yo no termino de entender este concepto y al parecer nuestra heroína favorita tampoco. Por eso es que siguió recitando su lista cual mantra sagrado cada vez que pudo, y vio una oportunidad única de venganza, cuando Ser Meryn Trant bajó de un barco en Braavos.
Arya se apareció en el burdel donde Trant estuvo abusando de menores y lo acuchilló montones de veces. Ser Meryn Trant se lo tenía merecido, la verdad. Y todos sentimos una especie de placer cuando ese pequeño cuchillo para abrir mejillones termina con este caballero sádico y desagradable. Pero el Dios de los Muchos Rostros no. Ésa no era la vida que Arya debía tomar y la vida se paga con vida. De vuelta en la Casa de Blanco y Negro, Jaqen se suicidó. Y Arya, desesperada, lloró sobre su cadáver, sólo para darse cuenta de que Jaqen estaba detrás de ella, preguntándole por qué lloraba. Arya, desconcertada (como nosotros), comenzó a sacarle las distintas caretas que tenía el cuerpo de Jaqen. Jaqen no es Jaqen, es un viejo, es una niña, es Arya misma…y así fue como la propia Arya perdió la visión.
Sí, la situación de Arya es rarísima. ¿La ceguera será el castigo del Dios de los Muchos Rostros? ¿O será un paso más en su entrenamiento para convertirse en NADIE?
- Daenerys y sus dragones indomables
Daenerys había perdido el control de sus dragones hacía rato. El problema con ellos era tan grande que tenía que tener a dos encerrados y encadenados. Pero el tercero, Drogon, se había escapado. Esto fue una buena noticia cuando apareció e incineró a todos los Hijos de la Harpía, permitiéndole a Daenerys escapar en su lomo, pero no tanto cuando la dejó en medio de la nada y ya no quiso obedecerla para volver. ¿Dónde están? Nadie sabe. Dany empieza a caminar y se encuentra en medio de una horda Dothraki que la rodea. ¿Con qué propósito? ¿Por qué tira su anillo? ¿Se darán cuenta que ella fue una Khaleesi antes de ser Reina?
Mientras tanto, en una Mereen sumida en caos y violencia, un enano con la cara surcada por una cicatriz, el comandante de los Inmaculados y la persona de más confianza de Daenerys quedaron a cargo de la ciudad. Y al final, cuando Tyrion se preguntaba cómo va a hacer, aparece su más fiel compañero Varys para darle una mano. ¡Cómo extrañábamos este dúo y sus conversaciones enigmáticas!
- Al final Jon Snow no sabía nada
Y lo mejor (o lo peor) quedó para el final. Ya sabíamos que Jon se había granjeado el disgusto de sus compañeros de la Guardia de la Noche al ir a buscar a los Salvajes a Hardhome, ¿pero un motín? ¿En serio chicos? Sin duda este desenlace nos dejó a todos absolutamente absortos. Incluso a aquellos que ya sabíamos lo que iba a ocurrir. Pero de alguna forma, verlo plasmado y lleno de sangre, lo hace mucho peor. ¡Se suponía que eras el Elegido! ¿Qué pasó con las teorías conspiranoicas en las que sostenían que la Canción de Hielo y Fuego hablaba de Jon Snow? ¿Qué pasó con las teorías de la madre de Jon? ¡Se suponía que Jon tenía el Hielo y tenía el Fuego! ¡Hielo por Lyanna Stark y Fuego por Rhaegar Targaryen! Maldito George Martin.
De todas formas, existen algunos puntos que nos dan esperanza: ¿Qué hace Melisandre en Invernalia? ¿Acaso los Sacerdotes Rojos no tienen la capacidad de revivir a la gente? ¿No dijo Sam alguna vez que Jon siempre regresaba? ¿Qué va a pasar con el ejército de Caminantes Blancos?
Qué ironía que el único personaje en la serie que parece entender perfectamente el peligro que corre la humanidad cuando llegue el invierno y con él los Caminantes Blancos, sea el mismo que no vio venir la traición de sus hermanos.
Al final, Ygritte tenía razón: “No sabes nada Jon Snow”. Y nosotros tampoco.
Hasta ahora, la peor temporada que hemos visto de Juego de Tronos. No por la calidad, que continúa siendo buenísima, sino por los giros que dio la historia. Muchos fanáticos se sintieron tan mal con este final que sostienen que no volverán a ver nunca Juego de Tronos. Que la muerte de Jon es comparable a la de Ned en cuanto a magnitud. Pero todos volveremos. Tarde o temprano. Esperemos que la próxima temporada nos traiga más respuestas que preguntas y que solucione este temita de Jon que nos dejó tan mal a todos. Y ahora, a esperar un año.