Mientras hace días se anunció la renovación para una quinta temporada de Boardwalk Empire, actualmente está transcurriendo la cuarta temporada de la serie de HBO que tiene como protagonista a Steve Buscemi. A mi juicio, la temporada pasada fue la mejor de las tres anteriores, y había terminado con la guerra entre las facciones de Atlantic City y Nueva York, con una negociación entre Nucky Thompson, Masseria y Rothstein, luego de haber derrotado a Rossetti, con la complicidad de Al Capone.
Hasta el cuarto episodio de Boardwalk vamos así…
La temporada comienza con la cacería de Richard Harrow, en su afán de ser asesino a sueldo, con dos nuevas muertes que se carga. Sin embargo, el principal momento del primer capítulo empieza cuando nos enteramos que el sueño de Chalky White de tener su club de música y el camino al principio de las complicaciones para su kiosco, se hace realidad.
Un suceso que involucra a Dunn Purnsley, empleado de Chalky, en el episodio inicial parece que determinará su relación con White a lo largo de toda la temporada como sucedió anteriormente con Jimmy y Al Capone. ¿Por qué? Porque esto da pie a la entrada de Valentine Narcisse, interpretado por Jeffrey Wright, un personaje enigmático y misterioso, con un temple firme y contundente que intimida en el momento que debe hacerlo. A lo que lleva esta quinta temporada es de lo que más promete en un futuro, ya que interviene para meter un poco de púa en el club de Chalky dar pie a un futuro problema.
El Dr. Valentine Narcisse es el nuevo y conflictivo personaje de la temporada que acaba de comenzar.
A fuego lento ¿te asarás mejor?
Como todas las temporadas anteriores de la serie, esta nueva entrega tiene un ritmo mucho más lento en su trama. Parece que no avanza, aunque de a poco entrega indicios de cuáles serán los principales puntos de conflicto. Nucky empieza a pensar en extender sus negocios hacia el sur de los EE.UU., donde se encuentra con un amigo desesperado por negociar, y que parece que lo meterá en un lío futuro a Enoch ya que por más que los evite, tiene vocación para ellos. Sobre todo con un emergente John E. Hoover que apareció para asomar la cabeza, asustar un poco y brindar un poco de expectativa para lo que vendrá.
Al Capone también va adquiriendo mayor protagonismo, introduciendo a sus hermanos en el negocio del delito y tomando como complice a… Nelson Van Alden. Los problemas de carácter y personalidad del ex agente federal lo llevan a involucrarse cada vez más con la mafia, al punto de vivir en una incomodidad permanente. La tensión cómica que generan Al Capone con Van Alden muestra momentos de risa que hasta ahora fueron los puntos más altos de una temporada que viene floja.
Floja por varios motivos: Los conflictos que se están generando hasta el cuarto capítulo no parecen ser demasiado trascendentes como en temporadas anteriores y traen la típica tensión que solía ponerse en juego, sobre todo en la tercera entrega que se mantuvo contante desde el primer al último episodio. De los comienzos es el menos interesante por lejos, los capítulos se hacen largos y sin demasiados conflictos en juego.
También surge la historia Willian, hijo de Eli Thompson, la cual no atrae demasiado hasta el capítulo cuatro, aunque convengamos que hubo un poco de picante en el último que se transmitió hasta el momento, y que puede generar bastantes problemas. Por el otro lado, las historias de Richard siempre atrapan y saben crear climas misteriosos que intrigan absolutamente, sobre todo al visitar a la hermana es que casi tan misteriosa como él. Gillian se encuentra sorteando los problemas legales para mantener al hijo de Jimmy, con lo cual , intenta vender la casa y ahí conoce a un hombre con el cual mantiene cierta relación.
Richard Harrow vuelve a la cacería. ¿Qué pasará?
Es sólo el principio…
Por ahora este es el panorama de la cuarta temporada hasta el cuarto capítulo, intentamos no spoilear demasiado debido a que en Latinoamérica estamos recién por el primer capítulo que se estrenó el domingo que acaba de pasar. Por ahora viene todo muy lento, se encuentra abriendo el juego y sacando puntas, no podemos juzgar demasiado a una temporada que acaba de empezar y conociendo la historia reciente de la serie, no conviene hablar demasiado hasta que hayan terminado de jugarse todas las cartas.