Dirección: Ana Katz Origen: Argentina Uruguay Año: 2015 Elenco: Julieta Zylberberg, Ana Katz, Maricel Álvarez, Mirella Pascual, Malena Figó y Daniel Hendler Guión: Ana Katz e Inés Bortagaray Fotografía: Guillermo “Bill” Nieto Música: Maximiliano Silveira Distribuidora: Primer Plano Duración: 84 minutos Fecha de estreno: 17 de septiembre de 2015
Nacer, ¿y después?
Mi amiga del parque, el nuevo film de Ana Katz (Los Marziano, Una novia errante) se centra en Liz (Julieta Zylberberg) una treintañera que, por un lado continúa haciendo el duelo por el fallecimiento de su madre, y por otro está estrenando su maternidad en una forma cuasi solitaria, ya que su marido (Daniel Hendler) vive viajando por cuestiones laborales. Todas estas situaciones hacen que Liz se sienta constantemente angustiada y desbordada, para colmo, el hecho de que todo el mundo opine sobre cómo ser una buena madre –aún aquellos que no han experimentado eso- complica más las cosas.
Pronto comienza a acudir a un parque cerca de su casa, donde pasea a Nicanor. Allí, mientras intenta sentar a su bebé en una hamaca conoce a Rosa (Ana Katz), quien también pasea con una beba un poco mayor. Rápidamente Rosa indaga en la vida personal de Liz, pregunta a que se dedica, si tiene auto, y demás cuestiones. Liz ve en Rosa algo muy extraño, pero es justamente eso lo que la atrae y le hace pensar que pueden acercarse más, aunque manteniendo cierta cautela. Posteriormente Liz conoce a Renata (Maricel Álvarez), hermana de Rosa, y madre de la beba que ésta paseaba.
Las hermanas R –como las nombra el grupo de madres y padres más habitúe que asiste al parque en cuestión- son de alguna forma, la antítesis de Liz en cuanto a crianza y maternaje se refiere: son más descuidadas, más espontáneas, menos apegadas y también bastante menos dramáticas que nuestra protagonista, y todo eso preocupa, altera y confunde a Liz. Mi amiga del parque se presenta como “una comedia preocupante”, porque si bien el film incluye momentos más cómicos, o de comedia drámatica; el verdadero género que se observa es el suspenso, suspenso por lo que no se dice, y por lo que no se entiende, tanto en la relación de estas mujeres entre sí, como en el proceso de maternidad que cada mujer atraviesa.
De esta forma, Katz, tal como había realizado en Una novia errante (2007), se sumerge e indaga en el universo femenino desde una perspectiva poco usual, desmitificando el idilio y la perfección en torno a la maternidad, o incluso cuestionando la concepción de “instinto maternal” que tantos debates ha causado en el mundo de la psicología y la medicina. En un estilo similar a la propuesta de la serie Según Roxi (2015), Mi amiga del parque ahonda en el costado más cotidiano de la maternidad, en la constante mirada del Otro que juzga y sentencia el hecho de que una mujer no pueda amantar, o que quiera un “día libre” para ver a sus amigos, o incluso que deje a su hijo al cuidado de otros. Ante todas estas situaciones, el film propone una respuesta: no hay buenas ni malas acciones, cada persona cría a sus hijos como quiere pero sobre todo, como puede, y en el camino aprende, tal como le sucede a Liz, a aceptar otros modelos de maternidad.
En cuanto a las actuaciones, se destaca el virtuosismo actoral de Zylberberg, que está muy bien acompañada por todo el elenco, en especial las actrices mencionadas. En cuanto al guión –realizado en conjunto por Katz y la escritora y poeta uruguaya Inés Bortagaray– sólo diré que resulta exquisito, inesperado y sumamente interesante al centrarse en esta crítica a ciertas ideas preestablecidas en la sociedad, tomadas como única verdad o posición.